Un estudio realizado
por dos universidades suizas concluye que el COVID-19 podría transmitirse a
través de micropartículas contaminantes presentes en el aire, por lo que en
días de alta contaminación podría expandirse con mayor rapidez.
Los científicos, dirigidos por el investigador del Instituto de Ciencias Ambientales de la Universidad de Ginebra Mario Rohrer, concluyeron que el virus aumentó su transmisión en periodos de alta concentración de micropartículas de diámetro inferior a 2,5 micras, principales causantes de fenómenos como el smog.
Los
aumentos de concentración de micropartículas que pudieron ayudar a la
transmisión del virus tendrían que ver con las inversiones térmicas que se
producen en días de niebla o con nubes de polvo procedentes del Sahara.
El estudio muestra asimismo que una alta concentración de micropartículas contaminantes en el aire causa la inflamación de las vías respiratorias, pulmonares y cardiovasculares, y la coagulación de la sangre, lo que combinado con una infección viral como la covid-19 puede aumentar los casos graves de esta enfermedad.