En cuanto a
los primeros, los síntomas más habituales y reconocidos desde el principio de
la pandemia, la Organización Mundial de la Salud enumera la tos seca, la fiebre
y el cansancio.
El Ministerio de Sanidad añade a estos síntomas comunes la sensación de falta de aire o disnea, esto es, dificultad para respirar.
Otros
síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y
molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor
de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones
cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies, tal y como
recoge la web de la OMS, que apunta que “estos síntomas suelen ser leves y
comienzan gradualmente.
Las lesiones cutáneas identificadas durante la primera ola, catalogadas en cinco tipos: maculopapulares, vesiculosas, urticariformes, pseudoperniosas (similares a sabañones) y livedo-reticularis-necrosis, no están siendo observadas en lo que llevamos de segunda ola, según han revelado los dermatólogos.
El
Ministerio de Sanidad, en su último informe técnico, también recoge otros
síntomas descritos relacionados con distintos órganos y sistemas. En un estudio
con 214 pacientes ingresados en un hospital de Wuhan, el 36% tenían síntomas
neurológicos: mareo (17%), alteración del nivel de conciencia (7%), accidente
cerebrovascular (2,8%), ataxia (0,5%), epilepsia (0,5%) y neuralgia (2,3%).
También se han descrito casos de síndrome de Guillain-Barré.